Quiero alguien que entienda cada caída mía, que me escuche al contarla, que me entienda al contarla y con eso no me refiero a que me diga: "te entiendo" porque, para mí, para decir eso hay que sentirlo primero. También quiero que cuando sepa de mis caídas sepa quien es la piedra y que después de criticarla no haya un "PERO". Esos peros me tienen re contra harta, ¡no los aguanto más!
A veces me confío mucho de alguien y me voy por las ramas, le sigo la corriente ¿y qué? me pasa por arriba. A eso voy cuando digo que soy buena, porque no soy buena, soy buena y se aprovechan de eso. Pero no es fácil encontrar a un amigo de verdad, a alguien que se da cuenta cuando estas triste, que por más que sonreís sabe como estas por dentro, que es sincero y que si hay algo que no le gusta te lo dice, no se lo guarda y lo piensa o lo dice a los demás, que no se ríe de vos si no que con vos. Ese con el cual tenes una confianza que con nadie más tenes. No cualquiera tiene uno. Hay que merecérselo, ya se, ya entendí, por eso no tengo uno, no me lo merezco. ¿No me lo merezco? quizás si pero falta para que llegue, o quizás ya llegó hace rato y todavía no se quien és. Si, puede ser hasta quien menos me imagine.
No quiero ser quien, cuando me nececites, te busque, si me necesitas buscame, si yo lo hago te invito a: pasarme por arriba nuevamente (por más de que no lo notes)
No sé, sinceramente no lo sé...
No quiero ser quien, cuando me nececites, te busque, si me necesitas buscame, si yo lo hago te invito a: pasarme por arriba nuevamente (por más de que no lo notes)
No sé, sinceramente no lo sé...
By Sol <-------- a partir de ahora por siempre yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario